sábado, 13 de junio de 2020

Insensatez

Hemos ido a pasear por Donostia (una ciudad de tamaño pequeño, de unos 180.000 habitantes). Diría que menos de la mitad de los paseantes llevábamos mascarilla, a pesar de que no siempre es posible garantizar la distancia, las terrazas estaban completas y no se respetaban las recomendaciones… Me temo que si no modificamos nuestras malas costumbres tendremos un rebrote que nos dejará de nuevo temblando.


martes, 9 de junio de 2020

La paradoja de la mascarilla

Por fin se ha hecho obligatorio llevar mascarilla salvo en el caso de que se pueda garantizar una separación de dos metros. Me parece bien. 
Yo siempre llevo mascarilla y me cruzo con muchas personas que no la llevan y no guardan la distancia recomendada. Entonces, me pregunto: ¿quién debe desviarse para mantener la distancia de seguridad? ¿Los que llevamos mascarilla o los que no la llevan porque pueden respetarla?

viernes, 5 de junio de 2020

¡Manta terminada!

¡Por fin he terminado la manta que empecé el 16 de abril y que os mostré en el post anterior!

El final me ha costado un poco porque el tutorial no mostraba cómo terminar el remate del borde y aunque se me ocurrió cómo hacerlo, se me había hecho un poco tarde y no trabajo bien los colores oscuros cuando no tengo seguridad en lo que estoy haciendo y hay poca luz. Por esa razón lo dejé para el día siguiente y estoy muy orgullosa del resultado: el tacto es muy agradable, visualmente es muy vistosa sin resultar chillona, las medidas (120 cm x 170 cm aprox.) son muy correctas para el uso que se le va a dar, me llegó la lana que había estimado que necesitaría (*) y fue una labor que realicé muy a gusto.



Debo reconocer que el ganchillo me engancha y después de empezar la manta ya no he podido hacer casi nada más hasta que la he terminado.


(*) siempre tengo miedo de que no me llegue la lana y de que al terminar, como ya ha pasado tiempo desde que la compré, no pueda pedir más madejas de la misma tintada. Por eso, cuando llevo cierto tamaño con la labor, suelo recalcular lo necesario por si al comprar hubiese pedido de menos y estar a tiempo de pedir más madejas. Pero esta vez, no me di cuenta de que había que dar una vuelta completa a la manta antes de hacer el borde y, realmente, estuve un poco nerviosa de que el color negro fuera insuficiente.

sábado, 23 de mayo de 2020

Punto y ganchillo

Los que habéis seguido mi blog ya sabréis que me gustan los trabajos manuales. Entre mis aficiones favoritas están el punto y el ganchillo pero son actividades que necesitan mucho tiempo y durante años no he podido practicar.
Considero que, hoy en día, el punto es más apropiado para prendas que se puedan usar. Desde hace 3 años he conseguido hacer 3 bonitos jerseys para mis hijas que me han hecho muy feliz. Ya sé que económicamente no compensan porque se pueden comprar jerseys mucho más baratos en una tienda pero puedes escoger el material con el que hacerlos y si los compras, lo más probable es que solo puedas encontrar jerseys acrílicos, de poliéster o mixtos (con mezcla de tejidos: algodón y poliéster, lana y acrílico,…). Además, cuando lo terminas, te invade una agradable sensación: ¡esto lo he hecho yo! (*)
Personalmente me gusta más hacer ganchillo: es más cómodo, no se cansan tanto los hombros, puedes practicarlo en cualquier lugar porque no necesitas mucho espacio a tu alrededor, yo he hecho ganchillo en el tren, y con las piezas grandes, no necesitas sujetar mucho peso con tus brazos porque solo levantas un poco que estás tejiendo en ese momento. Por el contrario, en el punto, estás constantemente levantando toda la pieza y si es grande puede ser pesado. El problema del ganchillo que yo conocía, el ganchillo tradicional, es que no está de moda. ¿Qué se puede hacer para poder usar a diario si el aspecto de los tejidos de encaje de ganchillo te parecen pasados de moda? Los tapetes de ganchillo para los muebles hace tiempo que quedaron en el olvido. Aunque hace un tiempo que se puso de moda hacer animales y muñecos de ganchillo, los amigurumis, no me ha enganchado la idea. Últimamente solo había hecho dos toquillas (**) para mi sobrina. Pero, hace unas semanas, mi hija me pasó este link:
https://www.youtube.com/watch?v=PhRZm0VAPSY&feature=youtu.be
y me encantó el aspecto de su labor: hacía un precioso efecto de pata de gallo y no parecía ganchillo. A partir de ahí se me ha abierto un mundo nuevo y he descubierto muchísimas labores de ganchillo que me parecen perfectamente utilizables hoy en día, que no me recuerdan en absoluto a las labores de los años 60.
Como he tenido mucho tiempo durante el confinamiento, pedí las lanas por internet y comencé a hacer una colcha de lana merina porque no pica. Ayer he terminado la primera parte, me falta hacer el borde y rematar. Cuando esté terminada, tendrá 120 cm x 170 cm aproximadamente, perfecta para usar en el sofá.

Aquí tenéis un detalle de cada lado de la labor. Hay una pequeña diferencia de aspecto y, por eso, uno de los lados se ve más claro y el otro más oscuro, aunque en las fotografías no se aprecia demasiado.


Lo malo que tienen tanto el punto como el ganchillo es que necesitan de muchísimo tiempo (***) y como yo sabía que en algún momento iba a tener que volver a trabajar, le he dedicado todo lo que he podido y he tenido que dejar el blog de lado.

(*) ver https://unpocoydemas.blogspot.com/2018/05/con-tus-manos-y-2.html
(**) ver https://unpocoydemas.blogspot.com/2016/12/crear-con-tus-manos.html
El año pasado hice otra de color lila porque la anterior se le había quedado pequeña y se lleva con el vestido tradicional de casera

(***) corresponde a unas 90 horas de trabajo, sin contar las de deshacer y volver a hacer para corregir un error

domingo, 26 de abril de 2020

Hacia una nueva normalidad

Ya se empieza a hablar en nuestro país de que en un plazo cercano podremos empezar a abrir nuestro mundo poco a poco. Todo dependerá de ciertos indicadores que todavía no conocemos pero cuando alcancemos los valores esperados, nuestras vidas se irán acercando a esa nueva normalidad que nos espera. A pesar de lo que nos gustaría, esa nueva normalidad estará muy alejada de lo que eran nuestras vidas antes de la aparición en ellas del covid-19.
Yo, por lo pronto, el martes empiezo a trabajar. Por una parte con ganas, con ganas de salir de estas cuatro paredes y volver a entablar contacto con mis compañeros, pero por otra parte con un poco de miedo a la situación que me voy a encontrar. Supongo que todo habrá cambiado, de hecho, en mi caso cambiaré de lugar en mi trabajo para aumentar las distancias. Todo sea por asegurar en la medida de lo posible que no nos contagiamos entre nosotros en el caso de que alguno se encuentre enfermo por el dichoso coronavirus.
Además tendré que cambiar mis hábitos ya que, habitualmente, me desplazo en transporte público pero tendré que hacerlo en nuestro coche para protegerme pues tengo un paciente de riesgo en casa. Y al volver, tendré que regresar a casa sin detenerme, sin paseos, sin escaparates, sin más compras que la de la alimentación. Aumentaré mis salidas de casa y eso me obligará a extremar precauciones al volver.
Por el momento, no se parecerá en absoluto a lo que yo recordaba. Esperemos volver a la otra normalidad cuanto antes…

jueves, 23 de abril de 2020

Día del libro

Hoy se celebra el día del libro de manera totalmente atípica porque no podremos salir a ver los libros en el mercadillo de libros que se suele poner o en las librerías, no podremos verlos y tocarlos para ver la sensación que nos transmiten antes de decidirnos a comprarlos. Nunca sé por qué he cogido un libro y no otro, por qué ha llamado mi atención, si fue la llamativa portada, el título ingenioso, el sorprendente nombre del autor o la interesante descripción de la contraportada,… A veces, el libro que me seduce puede ser el que parece querer pasar desapercibido entre el montón de libros…
Nos queda la opción de buscar y comprar en Internet pero dados los problemas que hay en los envíos, pasará mucho tiempo hasta que te llegue. ¿Qué puedes hacer entonces para honrar este día como se merece si no tienes un libro empezado?
Seguro que tienes en tu biblioteca algún libro que nunca has leído o libros que leíste hace mucho tiempo y ni siquiera recuerdas cómo eran o libros que te gustaron pero hace mucho que no los has vuelto a coger… ¿A qué esperas? Coge uno de ellos y dedícale un rato, concédele a este día un momento y seguro que no te arrepientes.
Yo cambié el mueble de mi biblioteca hace poco y quiero aprovechar para liberar un poco de espacio. Estoy releyendo libros que llevan mucho tiempo en mi casa, que leí pero ya no recordaba, con la idea de decidir cuáles se quedan y cuáles se van. En este momento estoy leyendo “El navegante” de Morris West. Llevo leído un tercio y me parece que se va a quedar.

miércoles, 22 de abril de 2020

Día Internacional de la Madre Tierra - Día de la Tierra

Aunque no tenemos planeta de repuesto, hay que reconocer que no lo hemos tratado demasiado bien. A pesar de las voces de alerta y las peticiones para frenar el cambio climático, todos los gobiernos han primado el desarrollo económico y todos los pasos que se han dado a favor de la Tierra han sido pequeños para paliar todo el daño que le estamos haciendo.
Y ha tenido que venir el COVID-19 a obligarnos a parar, nos hemos visto obligados a detener nuestra frenética actividad y el planeta ha podido, al fin, respirar. Esta pandemia ha obligado a nuestros gobiernos a hacer más de lo que estaban dispuestos y la Tierra ha salido beneficiada.
Hoy se celebra el Día Internacional de la Tierra (*), espero que hayamos aprendido y no volvamos a la situación anterior. Todos los demás habitantes de la Tierra lo agradecerán, y nosotros también.

¡Feliz día de la Tierra!

(*) cada 22 de abril desde 1970

Links de interés:
https://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%ADa_de_la_Tierra
https://www.un.org/es/observances/earth-day

PD: en el momento de escribir este post no era consciente de que este año se celebra el 50º aniversario de la celebración del día de la Tierra