domingo, 2 de abril de 2017

Montar a caballo

Una de las cosas buenas de las vacaciones es que te permite romper tabúes y tomar contacto con situaciones con las que habitualmente no convives. Esto es lo que me ha pasado durante estas vacaciones. Hemos estado con amigos que están aprendiendo equitación.


Y mientras ellos practicaban como novatos,…

… otros jinetes aprendían técnicas más avanzadas.


De esa forma surgió, para nosotros, la posibilidad de montar a caballo. Para mí se trataba de una prueba de fuego porque tengo vértigo y siempre me ha parecido que los caballos son muy altos pero estaba dispuesta a probar.
Esta es Greta, una bonita yegua que me permitió montar a caballo ¡por primera vez en mi vida!


No me voy a poner a dar clases de equitación pero fue una bonita experiencia.
Últimamente estoy tan dispuesta a probar nuevas situaciones que tengo a mi marido ¡completamente sorprendido!

No hay comentarios:

Publicar un comentario